EL ZUMBIDO EL MOSCARDÓN
Francisco Alejandro Leyva Aguilar
X: @leyvaguilar
Nos enteramos más por
la prensa nacional que por la local, lo que pasaba en la Guelaguetza el lunes
pasado. La protesta de Ángeles Cruz y la violencia contra Edwin Hernández foto
reportero de El Universal tuvieron más cobertura mediática en los medios nacionales
que en en los de Oaxaca ¿por qué? Guelaguetzas
anteriores, han sido testigo de innumerables protestas que la prensa local
cubre con puntualidad, recuerdo las del sexenio de Ulises Ruiz donde incluso
hubo un enfrentamiento entre profesores de la sección XXII y policías en las
inmediaciones del cerro del fortín y tuvo puntual cobertura de la prensa local
¿por qué ahora no sucedió así?. Fue muy evidente la
manera en que las damas de Jesús Romero, fueron a pararse a un lado de la
cineasta, para tratar de opacar su protesta lo que la potenció, por eso Salomón
Jara debería de despedir a René Palacios, un argentino que marca pautas de
comunicación entre los reporteros locales y que tiene a la Coordinadora de
Comunicación Social Elizabeth Álvarez de florero. El argentino no tiene
idea de cómo controlar riesgos como el del lunes pasado y si a eso le sumamos
que entre él y el Secretario de Gobierno Jesús Romero no hay química, pues el
caldo estaba listo para el escándalo. Las nenas de Jesús Romero fueron las protagonistas
que trataron de detener la protesta de la cineasta mixteca y el que tuvo que
contener con un video donde Salomón Jara abraza a Ángeles, fue René y ni así
pudo minimizar el hecho. Lo que sí hizo el
asesor en materia de comunicación del gobierno del serrano, fue mandar un
mensaje a una lista de “periodistas” que son beneficiados con una dádiva
mensual y que los reúne en un chat para marcarles línea. Cuando hay un
acontecimiento que el argentino supone que le va a hacer daño a la
administración de Jara, entonces manda esos mensajes para marcar línea e
incluso para decirles a los comunicadores que no cubran tal o cuál evento y así
contiene la comunicación en materia de protestas o manifestaciones contra el
gobierno del estado. Le da resultado con los
que tiene en la lista pero no con los periodistas libres que son regularmente
los corresponsales nacionales a los que sus medios, les exigen con veracidad,
la cobertura de los hechos. Por eso la protesta de Ángeles Cruz no tuvo cobertura
por parte de algunos medios locales a los que Salomón Jara, al través de la
Coordinación de Comunicación Social les paga una dádiva mensual. Y pues lo entiendo, ese
es el trabajo de un asesor de comunicación social pero ¿por qué mejor no los
contrata?, es decir ¿por qué no los mete a la nómina de Comunicación Social
como voceros del gobernador y su administración?, ¿por qué no los trata con la
dignidad del caso ofreciéndoles un sueldo digno, prestaciones de ley y seguro
social? Eso sería más digno que
ir a recibir un sobre mensual con un fruto muy espinoso dentro. Lamentablemente
el periodismo crítico se está acabando y tiende a desaparecer en regímenes
populistas como el que estamos viviendo, la libertad de expresión es lo primero
que se vulnera, ya con sobres amarillos, ya con amenazas veladas, ya con
balazos. La protesta de Ángeles
Cruz, un orgullo oaxaqueño porque es una cineasta mixteca y actriz reconocida
en todo el país y entre las élites del arte mexicano e internacional, es
completamente legítima, aunque la haya abrazado y besado el “gobernador”, así
en minúsculas y entre comillas en el mismo acto en el que se inconformó poco
después. Es legítima porque
lleva un año pidiendo justicia por la muerte de su hermano y de otras personas
más, entre ellas Luis Tapia, un amigo mío que no era un agente operativo, sino
administrativo de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) y que ese día
estaba en Lázaro Cárdenas donde ocurrió la masacre. Ya ha pasado un año y
ahí están las carpetas de investigación sin que haya una sola orden de
aprehensión. La preocupación de Ángeles que es una voz sonante en la sociedad,
más que la de cualquier ciudadano de Lázaro Cárdenas, San Miguel el Grande,
clama por justicia porque los hechos pueden repetirse ya que apenas el 17 de
julio hubo otra incursión de los perpetradores de la masacre de hace un año y
¿qué ha hecho el gobierno? Ni siquiera dialogar
con las comunidades en conflicto, por eso el “gobernador” zapoteco debería
deponer a su secretario de gobierno Jesús Romero que tiene al menos DOSCIENTOS
OCHENTA Y TRES CONFLICTOS AGRARIOS ACTIVOS, 50 DE ELLOS DE ALTO RIESGO. Jesús no
se mancha los zapatos, no asiste a las comunidades, no dialoga, no pacta, no
hace su trabajo y eso se ha traducido en muertes, muchas de ellas inocentes. La prensa local, sobre
todo los de la lista de WhatsApp, no le van a dar cobertura a estos hechos,
pero para eso estamos lo periodistas que sí queremos la verdad, con todo y los
riesgos que eso supone. @leyvaguilar Instagram: leyvaguilar_ Facebook: Francisco
Alejandro Leyva Aguilar