Reaparece el papa Francisco; abandona el hospital Gemelli de Roma
Vivo Noticias
@VivoNoticiasMx
ROMA.- Este domingo,
después de 38 días hospitalizado, el papa Francisco abandonó el Policlínico
Gemelli de Roma, poco después de reaparecer en público desde
una ventana del hospital, desde la que agradeció el apoyo de la multitud que
esperaba para verle. El pontífice que fue ingresado
por una grave infección respiratoria, dejó este 23 de marzo el hospital en
dirección a su residencia en el Vaticano, pero, por sorpresa, cambió de
dirección cuando estaba llegando. En un movimiento
inesperado, la comitiva encabezada por el pequeño utilitario que habitualmente
utiliza el papa para sus desplazamientos, se desvió de su camino para
desplazarse primero a la Iglesia de Santa María La Mayor, que custodia el
icono ‘Salus Populi Romani’, del que Francisco es muy devoto y que visita
siempre después de sus viajes. Durante su recorrido
por las calles del centro de Roma, que fue retransmitido en
directo por la televisión pública italiana RAI, numerosos viandantes se
detuvieron en las aceras para aplaudirle, mientras Francisco, que llevaba las
cánulas nasales para recibir oxígeno, saludaba desde el interior del vehículo y
agradecía las muestras de cariño. En la basílica romana,
en la que Francisco quiere ser sepultado, el pontífice dejó un ramo de
flores en señal de agradecimiento a la Virgen tras su larga
hospitalización y después la comitiva se dirigió, esta vez sí, a su residencia
en la Casa de Santa Marta del Vaticano. Francisco, que en el
texto del Ángelus que se difundió por escrito por sexto domingo consecutivo se
mostró “entristecido” por los bombardeos isarelíes en Gaza, pidió “un alto al
fuego definitivo”. Dejó el hospital en dirección a su residencia en el
Vaticano, pero, por sorpresa, cambió de dirección cuando estaba llegando. El pontífice, de 88
años, abandonó el hospital poco después de asomarse a una ventana del segundo
piso del Genelli, en su primera aparición pública en seis semanas
para saludar y bendecir a los fieles tras una
hospitalización en la que sufrió dos graves crisis que pusieron su vida en
peligro. “Agradezco a todos”,
dijo ante la multitud que abarrotaba desde una hora antes las puertas del
centro y las cámaras de televisión de medio mundo. Apareció en silla de ruedas,
con buen aspecto y sonriente, mientras levantaba el pulgar y la multitud que le
esperaba gritaba: “papa Francisco, papa Francisco”. “Veo a esa señora con
las flores amarillas, que bien”, añadió con la voz muy debilitada, después de
que el prolongado uso de oxígeno durante su hospitalización haya debilitado sus
músculos de la garganta, por lo que no pudo decir nada más. Con información de
agencias
