Éste es uno de los principales proyectos del Gobierno Federal para el 2021 en el sur de la entidad.

De hecho, fue anunciado desde diciembre del 2019 por el presidente Andrés Manuel López Obrador y según el ejecutivo federal se llevaría a cabo con los recursos del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado.

Incluso, el mandatario no descartó que la gente se encargara de la construcción y no una empresa.

La semana pasada, la SCT ingresó el Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA) del proyecto ante la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

Según el documento, los trabajos contemplan una longitud de 32 kilómetros, 61 obras de drenaje, el mejoramiento de la superficie de rodamiento en siete puentes, la ampliación de 6.4 a siete metros de ancho, entre otros.

El plazo para concluir la obra es de 60 meses y tendrá una vida útil de aproximadamente 30 años, con lo que se podrá circular a una velocidad de 60 kilómetros por hora en una vía libre de peaje.

Actualmente, la vía se encuentra en condiciones deplorables debido a la falta de mantenimiento y las intensas lluvias registradas durante las últimas semanas en la región sur.